Producción

Siembra 

 La alfalfa puede ser sembrada en cualquier época del año, pero es recomendable establecerla en el otoño e invierno, es decir, del 15 de octubre al 15 de febrero. En este período los problemas por maleza se reducen, debido a la presencia de temperaturas bajas.

  Labores que requiere el terreno para la siembra de alfalfa.

 
 

• Subsoleo. Esta labor consiste en romper las capas más profundas del suelo, con el objetivo de mejorar las condiciones de drenaje y aumentar la capacidad de almacenamiento del agua.

• Barbecho. Sirve para romper y aflojar el suelo, enterrar residuos de la cosecha anterior y eliminar parcialmente las plagas del suelo. Se sugiere hacer esta labor a una profundidad entre los 30 a 35 centímetros.

• Rastreo. Después del barbecho, es necesario dar uno o dos pasos de rastra para romper los terrones y mullir el suelo; con esto, se puede obtener una cama que facilite la nacencia de la planta.

• Nivelación. Cuando el terreno destinado a la siembra de alfalfa no sea plano, es conveniente realizar la nivelación para distribuir mejor el agua de riego y la de lluvia. La nivelación evita encharcamientos que provocan la asfixia de las raíces y la incidencia de enfermedades. 

Densidad de siembra

Cuando el terreno está bien preparado, se requieren de 30 a 35 kilogramos de semilla por hectárea. La densidad inicial de plantas de alfalfa depende de la proporción de semilla viable y tiene efecto a largo plazo sobre la vida productiva del cultivo. Cabe señalar que si se usa una cantidad de semilla mayor a la recomendada no se aumentan los rendimientos por hectárea, pero si se elevan los costos de establecimiento del cultivo.

  Métodos de siembra
La mejor forma de sembrar es con maquinaria, ya que se logra una mejor distribución y tapado de la semilla; la sembradora mas apropiada para la siembra es la "brillion" que tiene dos rodillos corrugados. también se puede realizar al voleo, ya sea manual o con sembradora tipo cyclone; con esta forma de siembra se debe cuidar que la semilla no quede a una profundidad mayor a dos centímetros. 

  Cultivo 

• Riegos 

Los riegos durante la etapa de establecimiento son los más importantes; se debe tener la superficie del suelo húmeda, a fin de evitar la formación de costras que impidan la emergencia de las plántulas.

Después del riego de germinaciòn  se debe aplicar un sobre riego a los 10 días posteriores, para evitar la formaciòn de costras y que éstas impidan la emergencia de las plántulas. 

Antes de realizar el primer corte, se deben dar entre cinco y seis riegos; después de a cada corte regar cada 15 días; se suspenden durante las lluvias y en el ciclo de otoño-invierno.

Control de plagas 

Pulgón manchado 

Insecto que mide tres milímetros, de color amarillo pálido a gris, tiene seis hileras de puntos negros en el dorso del cuerpo, posé antenas y patas cortas. el insecto chupa la savia de las plantas, inyectando su saliva que contiene toxinas que trasforman el crecimiento de la planta, causando amarillamiento y enrrollamiento de las hojas, las que después se caen.

pulgón verde

Insecto chupador del color verde brillante y verde oscuro, mide de tres a cinco milímetros en estado adulto. se alimenta de hojas y tallos internos, en la parte superior de la planta. El daño que ocasiona es el marchitamiento de las hojas superiores. las hojas se transforman en un color amarillento y se detiene el crecimiento de la planta.

Control de enfermedades

Marchitez foliar

Esta ocurre en áreas con drenaje deficiente o donde existen encharcamientos. El follaje de las plantas dañadas se torna amarillento y en algunas partes toman una coloración rojiza.

Pudrición Texana

Ocasionada por un hongo, el cual requiere de suelos alcalinos que tengan un alto contenido de carbonatos de calcio y ácido fosfórico. cuando existe una enfermedad se puede observar en el terreno plantas muertas en diferentes lugares, formando círculos de diferente tamaño.

 

peca de la hoja

Se le conoce así por las manchas que presentan las hojas similares a las "pecas" en los humanos. se presenta principlamente en periodo de lluvias y ataca directamente a las hojas, lo que afecta significativamente el valor nutritivo del forraje. Se observan en las hojas unas manchas circulares de color cáfe oscuro de uno a dos milímetros de diámetro.

Cosecha

El primer corte se debe realizar entre los 75 y 90 días después de la siembra, posteriormente se debe cortar la alfalfa cuando empiece a florear (cada 25 a 30 días en primavera y otoño, y cada 45 días en invierno) cuando los nuevos brotes tienen de tres a cinco centímetros de altura

De esta forma se le pueden dar de 9 a 10 cortes al cultivo durante el año. 

segar 

La alfalfa se corta o se cosecha durante el verano cuando el alfarfar presenta una floración de diez a 15 por ciento. En invierno se realiza cuando alcanza una altura de 35 centímetros. El corte se realiza a una altura de siete centímetros del suelo.

Juntar 

Después de que la alfalfa se sego, deberán transcurrir de cuatro a seis días en el campo para que se deshidrate, posteriormente se pasa al proceso de juntarla, por medio de rastrillos que van juntando la alfalfa en hilos para su posterior empaque, también sirve para voltear la alfalfa de manera que la luz solar la deshidrate del lado contrario.

Empaque

 
Pasados otros dos días se hace el empaque, generalmente este se hace en la noche (12:00 a 02:00 dependiendo de la zona) para esperar el roció, so no se hace este procedimiento con humedad se corre el riesgo de que la planta se desoje, lo que ocasiona perdidas para el agricultor. Se hacen pacas de 35 a 40 kilos, con una empacadora de hilo o de alambre. Es la acción final del proceso de cosecha. Para lograr un buen empaque y obtener forraje de alta calidad, es importante sincronizar las actividades de juntado y empacado, de tal forma que la alfalfa sea manejada con un contenido de humedad entre el 16 al 18 por ciento para evitar la caída de las hojas por el golpeteo de la empacadora.